Ante la firme expresión reiterada en el primer discurso por el recién electo presidente Joe Biden “clara victoria” con más de
74.000.000 de votos, resultado histórico sobre Donald Trump, se asoma otra “clara victoria” reflejado en la lectura que el mundo
recibe en torno a la elección por primera vez en la historia política de EEUU de una vicepresidenta con las características propias,
legítimas y naturales de lo que representa la lucha feminista, el lenguaje inclusivo, lucha por la igualdad, la garantía de derechos, la
lucha contra el patriarcado, contra el racismo y que hoy serán retos que el nuevo gobierno norteamericano tiene la oportunidad
histórica para enviar un mensaje claro, en términos de políticas públicas, a favor de las y los más vulnerables, las comunidades
minoritarias, afrodescendientes, niñez, inmigrantes, latinas y latinos, atención especial para la población migrante venezolana y sin
dudas, las mujeres.
Con la vicepresidenta crecen la esperanza para mejores oportunidades, empoderamiento y crecimiento de la Mujer; mientras, en
Colombia avanzamos significativamente en Paridad en el Código Electoral, las Políticas Públicas por la paridad en la participación
política.
El país del Norte le da el “SI” a una mujer negra, mágica, inteligente, de padres inmigrantes, ese es un mensaje poderoso no sólo por lo novedoso en el ejercicio de la democracia; sino por el referente que podría tomar frente a América Latina y las prácticas de buen gobierno. Este es el siglo de las mujeres. Ya lo habría mencionado ante el Señor Presidente Iván Duque, y demás asistentes al acto, durante mi intervención como vocera departamental de las Mujeres. Buscar la equidad, el lenguaje inclusivo, el enfoque de género, desaprender las culturas del patriarcado para cerrar brechas de género, eliminar toda clase de violencia contra la mujer, hoy se ponen más al día en la búsqueda incansable de las banderas feministas; al hablar de garantía de derechos a favor de las mujeres.
América Latina y el mundo entero les responden en términos de esperanza, de un gobierno que permita el crecimiento de la región,
la unidad nacional, de un mercado libre pero con respeto al PIB de cada pais miembro de la OMC, unas políticas económicas que
permitan el desarrollo sostenible, unas agendas sociales, programáticas, políticas y de gobierno, con Enfoque de Género, una
agenda común 2030 salvaguardando los DDHH, y las economías emergentes para ir superando a paso seguro los efectos
devastadores de la Pandemia del Cóvid 19. Así, que nadie se quede atrás, en el siglo de las Mujeres!.
